- Se le aplicó la eutanasia ante los graves padecimientos que sufría y que ya no tenían remedio
A Pobra, 30 de noviembre de 2011. Ayer, en el Refugio de Cambados, falleció Kira, la perrita rescatada de una finca de San Paio (A Pobra do Caramiñal) en unas condiciones terribles, hace apenas 15 días. Kira había permanecido durante casi un año encerrada en este solar sin que nadie se hiciese cargo de ella.
A pesar de permanecer visible en una casa a la entrada de la aldea, por lo que todo el mundo de San Paio sabía de su situación, nadie hizo nada para salvarle la vida, convirtiéndose en “espectadores” y cómplices de su muerte por inanición. Al parecer algún familiar de la dueña de la casa, fallecida hace precisamente un año, pasaba de vez en cuando dejándole alguna comida y en ocasiones un repartidor de pan le echaba un mendrugo, claramente insuficiente dado el gravísimo deterioro físico y anímico en el que se encontraba el animal.
"Cuando un grupo de amigos implicados en el activismo animalista, recibimos la noticia, enseguida nos desplazamos hasta allí. Cursamos la correspondiente denuncia ante la Fiscalía de Ribeira que actuó con gran celeridad autorizando a la Guardia Civil para que procediese al rescate de la perra. La Protectora Moura se hizo cargo de los primeros gastos que ocasionó su ingreso en una clínica de Boiro, y a los tres días la Protectora de Cambados acogió a Kira, aun sabiendo que el daño en alguno de sus órganos internos era ya irreversible. La mimaron e hicieron todo lo posible para intentar conseguir que recuperase su salud y viviese al menos unos cuantos meses en los que poder saber lo que es el cariño y una vida normal. Los últimos días los pasó con una gatita, su única compañía durante ese largo año de agonía en la finca y con la que había establecido un lazo de afecto muy grande", explican sus rescatadores.
Finalmente y a pesar de todos los cuidados y múltiples tratamientos, sin reparar en gastos, que le proporcionó la Protectora de Cambados, hubo que proceder a la eutanasia dados los fuertes dolores que padecía y su lamentable estado, sin posibilidad de recuperación.
"La muerte de esta perra no es tan sólo responsabilidad de los propietarios de la finca en la que se encontraba; toda la aldea de San Paio debería sentirse avergonzada de su actitud y de su falta de compasión. Ojalá, nunca nadie les niegue la ayuda que ellos tan injustamente le negaron a Kira", finalizan los animalistas que se hicieron cargo de este desafortunado cánido.
Antes, en Certo:
Rescate: dunha cadela a punto da morte por inanición
Posted via email from Certo.gl, o xornal dixital de Barbanza e Noia
No hay comentarios:
Publicar un comentario